CBD para la enfermedad inflamatoria intestinal

¿Puede ser que el CBD y el cannabis alivien los síntomas de la EII? 

El consumo de cannabis y CBD entre las personas que padecen EII es muy común. Sus numerosos defensores afirman que no solo ayuda a reducir el dolor, las náuseas, los vómitos, la diarrea y los calambres, sino que además de reducir el dolor y la rigidez de sus articulaciones. Pero, ¿qué hay de verdad en estas afirmaciones? 

Curakind analizará en esta entrada del blog varios estudios científicos, aportándote toda la información para que aciertes en tu decisión.

¿Qué es el cannabis?

El cannabis procede de la planta Cannabis Sativa, que crece en muchos países y regiones del mundo. Uno de los rasgos distintivos de esta planta es su resistente cuerpo fibroso, que tradicionalmente ha sido utilizado para fabricar cuerdas y materiales. Asimismo, sus 500 ingredientes activos diferentes, se han usado durante muchos siglos y siglos con fines medicinales y recreativos.

La Cannabis Sativa posee ciertos principios activos: los cannabinoides, flavonoides y terpenos. Todos ellos tienen beneficios para la salud; no obstante, la investigación médica moderna se ha centrado en el estudio de los cannabinoides.

¿Qué son los cannabinoides y qué es exactamente lo que hacen?

Los cannabinoides son un grupo químico que interactúa con otras sustancias naturales del cuerpo llamadas endocannabinoides. Éstas forman parte de un sistema que se encarga de regular una gran cantidad de funciones del cuerpo, consiguiendo que las células del cerebro y otros órganos liberen sustancias naturales con propiedades analgésicas, como son los neurotransmisores.

La mayoría de los estudios sobre la enfermedad inflamatoria intestinal se han centrado en dos de estos cannabinoides: el THC y el CBD.

El THC (Delta-9-tetrahidrocannabinol) es bastante popular. Sus propiedades incluyen la disminución de las náuseas y el dolor, un aumento del “apetito” (los munchies o antojos) y efectos psicológicos tales como la relajación, la euforia y la alteración de la percepción sensorial. Aquellos que lo consumen suelen referir sentirse “colocados” o drogados. Si bien es cierto que el THC promueve la creatividad y que ha sido también utilizado como tratamiento de la epilepsia, también es verdad que su consumo ha sido vinculado a ataques de ira, ansiedad y paranoia.

El CBD (también llamado cannabidiol) no es un psicotrópico, por lo que no produce ningún efecto psicoactivo. Lo que sí que podremos esperar al consumirlo (ya sea fumado o ingerido) son sus efectos sedantes. Además, el CBD ha sido vinculado con una disminución en las convulsiones, la sensación de náusea y la inflamación. También te puede ayudar a aliviar algunos de los efectos adversos del THC. 

¿Cómo funciona el CBD?

Los fitocannabinoides (como el CBD) han demostrado ser de mucha ayuda para mejorar el bienestar general del cuerpo humano. Esto se debe a que el CBD potencia el Sistema Endocannabinoide (ECS) y hace que funcione de forma más eficiente.

¿Qué es el Sistema Endocannabinoide (ECS)?

El ECS es un sistema regulador esencial que, mediante un sistema de cerradura y llave, controla aspectos como el sueño, el nivel hormonal, la fertilidad, el estado de ánimo, la respuesta al dolor y la ansiedad. Los receptores CB1 y CB2, que se encuentran en nuestros cuerpos, funcionan a modo de cerradura. Los cannabinoides (ya sean los endocannabinoides naturales de nuestro cuerpo o los fitocannabinoides de procedencia externa como el THC) se unen a estas neuronas, como si de llaves se tratase. 

Como ya se ha dicho, nuestro cuerpo presenta dos tipos de receptores distintos:

• Los receptores CB1, presentes en el sistema nervioso central (SNC).
• Los receptores CB2, presentes en el sistema nervioso periférico, especialmente en las células inmunitarias.

¿Cómo interactúa el CBD con el ECS?

Tanto el THC como el CBD interactúan con nuestro ECS, aunque de manera distinta. El THC se une directamente a nuestros receptores CB1 y CB2, produciendo una sobrecarga y efectos  casi inmediatos.

El CBD, en cambio, no se une directamente a los receptores, sino que estimula nuestro sistema endocannabinoide y  su eficiencia. Por esta razón, el efecto del CBD es mucho más sutil y altera menos los procesos propios del cuerpo. 

¿Qué son los cannabinoides y qué hacen?

Los cannabinoides son unos compuestos químicos que imitan el comportamiento de los endocannabinoides, unas sustancias que están presentes en nuestros cuerpos de forma natural; estos endocannabinoides son una parte esencial del sistema de control del cuerpo, ya que animan a las células de nuestro cerebro y otros órganos a que liberen sustancias naturales con propiedades analgésicas, como son los neurotransmisores.

A lo largo del tiempo, muchos cultivadores de plantas de marihuana han ido generando una gran variedad de cepas de cannabis; cada una de ellas con una combinación única de cannabinoides, flavonoides y terpenos y una mayor o menor potencia.

¿Cómo funcionan?

Los fitocannabinoides como el CBD han demostrado ser una potente ayuda para mejorar el bienestar general del cuerpo humano. Esto se debe a que el CBD potencia el sistema endocannabinoide (SCE) y hace que funcione de forma más eficiente.

¿Qué es la EII?

La enfermedad inflamatoria intestinal (EII) es un término general que describe aquellos trastornos del tracto digestivo debido a la existencia de una inflamación crónica. Los tipos de EII incluyen:

• Colitis ulcerosa. Esta enfermedad implica la inflamación de la mucosa y la aparición de llagas (úlceras) en el revestimiento superficial del intestino grueso (colon) y el recto. 
• Enfermedad de Crohn. Este tipo de EII se caracteriza por la inflamación del revestimiento del tubo digestivo; suele afectar a sus capas más profundas.

La EII puede ser debilitante y, dependiendo de la gravedad de la enfermedad (medida por el índice de actividad de la enfermedad de Crohn), puede llegar a ocasionar la muerte.

¿Cuáles son los síntomas de la EII?

Los síntomas varían mucho en función del lugar dónde se encuentre la inflamación y de su gravedad. Pueden darse periodos de remisión pero, en general, estos son los síntomas de que la enfermedad se encuentra en fase activa:

• Fátima
• Dolor y calambres abdominales
• Diarrea
• Disminución del apetito
• Sangre en las heces
• Pérdida de peso involuntaria

¿Cómo funciona el CBD en el tratamiento de la enfermedad inflamatoria intestinal?

Las más que probadas propiedades antiinflamatorias de la marihuana medicinal y del CBD pueden tener un efecto calmante sobre el intestino. 

Además, el CBD inhibe la invasión de las células inmunitarias al tejido del colon y, así, reduce los niveles de inflamación en todo el tracto gastrointestinal. Estos efectos actúan de manera conjunta para proteger a los tejidos intestinales.

Aparte de ofrecer un alivio de los síntomas de la colitis ulcerosa y la enfermedad de Crohn, el CBD también puede aliviar síntomas de otras enfermedades que, de igual forma, afectan al sistema digestivo. Entre ellas se encuentran el síndrome del intestino irritable (SII), la gastritis, el ardor de estómago y el estreñimiento. 

Tratamientos actuales para la EII y sus síntomas

A la hora de tratar una EII, el objetivo es reducir la inflamación, bien a través de fármacos o por intervención quirúrgica. Los tratamientos más utilizados son:

Fármacos antiinflamatorios

Los corticosteroides y los aminosalicilatos se utilizan a menudo para tratar los síntomas de las enfermedades inflamatorias del intestino, en particular la colitis ulcerosa activa y la enfermedad de Crohn.

Supresores del sistema inmunitario

Los fármacos inmunosupresores, como la azatioprina, la mercaptopurina y el metotrexato, son comúnmente utilizados para tratar los síntomas de la inflamación intestinal.

Estos fármacos actúan de diferentes maneras para impedir que el sistema inmunitario libere sustancias químicas inductoras de la inflamación y que pueden llegar a dañar el tubo digestivo.

Medicamentos biológicos

Los medicamentos biológicos son tratamientos que neutralizan las proteínas del organismo mediante infusiones o inyecciones intravenosas. Algunos ejemplos de estos medicamentos son el infliximab (Remicade) y el adalimumab (Humira). El ustekinumab (Stelara) es un tratamiento más reciente para la enfermedad inflamatoria intestinal, que trata tanto la colitis ulcerosa como el trastorno de Crohn.

Antibióticos

Estos tratamientos se pueden combinar con la toma antibióticos, especialmente cuando la infección es problemática. En el caso del trastorno de Crohn perianal suelen prescribirse la ciprofloxacina (Cipro) y el metronidazol (Flagyl).

Consejos para vivir con una EII o la enfermedad de Crohn 

Uno de los mayores problemas de lidiar con esta enfermedad es que no se conoce ninguna cura y que, a veces, los síntomas pueden ser muy debilitantes. 

Al vivir con la EII, es importante recordar que no se trata sólo de la enfermedad activa. Existen nuevas formas de controlarla y esperamos descubrir nuevos tratamientos.  Es importante que cuides de tu dieta y de tu salud mental para reducir el riesgo de recaída.

Lo más importante para una pronta recuperación es el compromiso con los regímenes del tratamiento, así que haz siempre caso a tu médico, sigue revisiones periódicas y pregunta sin miedo siempre que tengas cualquier duda. No te olvides de guardar hábitos saludables, como cuidar de tus horas de sueño, consumir alimentos nutritivos (con suplementos dietéticos si fuera necesario), practicar la atención plena o la meditación, tomar baños o duchas cortas, etc. Estos hábitos de seguro te ayudarán a reducir la inflamación y mejorarán tu estado de ánimo. Esta enfermedad puede ser abrumadora, por lo que si vas introduciendo cambios poco a poco y te mantienes lo más saludable posible, podrás lidiar mejor con ella.

Además de seguir estos consejos generales para vivir con una enfermedad intestinal inflamatoria, también existen algunas medidas dietéticas más específicas que podrías seguir, si quieres controlar los síntomas de la EII. El uso de CBD es una de ellas. En lo relativo a los alimentos que se deben consumir durante los brotes de colitis ulcerosa o enfermedad de Crohn, resulta clave evitar cualquier alimento que provoque inflamación. Eso significa ceñirse principalmente (o en exclusiva) a como proteínas magras (pechuga de pavo, pescado), verduras sin semillas (brócoli, coliflor), zumos o smoothies de frutas sin azúcares añadidos (zumo de manzana, arándanos) y grasas saludables (aguacate, almendras).

Estudios sobre el CBD y la EII

Además de los numerosos testimonios anecdóticos, se han realizado también varios estudios y ensayos clínicos que investigan la utilidad del aceite de CBD y la marihuana medicinal en el tratamiento de la EII. 

Ya en 2010, una investigación sobre los efectos del THC y el CBD en las alteraciones de la motilidad in vitro que sufrían ratas con colitis, concluyendo que el THC y el CBD conseguían reducir tanto la inflamación como las alteraciones funcionales.

Un estudio prospectivo controlado con placebo llevado a cabo en 2013, demostró que al combinarlo con tratamientos habituales, el cannabis medicinal inducía una respuesta clínica en pacientes de Crohn. De los 21 pacientes que no habían respondido a los tratamientos tradicionales, cinco lograron la remisión completa de los síntomas y otros ocho vieron una notable mejoría. Los pacientes que utilizaron THC también informaron de una mejora significativa en el apetito y el sueño en comparación con el grupo de placebo.

Más recientemente, en 2018, se llevó a cabo una revisión de varios estudios controlados aleatorios. Se descubrió que el aceite de CBD de espectro completo constituyó un alivio efectivo para algunos síntomas de la enfermedad de Crohn, aumentando la calidad de vida de pacientes con esta patología.

Si bien es cierto que aún necesitamos más estudios clínicos, también es verdad que los resultados obtenidos demuestran que tanto el cannabis medicinal como el CBD tienen su valor en el tratamiento de la EII.

¿Cómo se toma el CBD para la enfermedad inflamatoria intestinal?

Hay diferentes maneras de tomar el aceite de CBD para la EII, y estas son las más comunes:

Aceites y tinturas de CBD

Los aceites de CBD son una mezcla que contiene un aceite portador, como el aceite de cáñamo, el aceite de oliva o el aceite de coco (MCT), y un destilado de CBD. Existe una gran variedad de concentraciones, que van desde un 2% hasta el 30% concentración.

El aceite de CBD suele venir en formato de frasco cuentagotas, que permite una dosificación bastante precisa. Deberás aplicar el aceite por vía sublingual (bajo la lengua) y mantenerlo allí tanto como puedas. El aceite será absorbido por las membranas mucosas y entrará directamente al torrente sanguíneo, sin tener que pasar primero por el sistema digestivo. El CBD así ingerido estará dentro de tu sistema unas 6-8 horas. Para ayudar a controlar los síntomas del SII y reducir la inflamación, lo mejor es tomarlo tres veces al día (en el desayuno, a la hora de comer y justo antes de acostarse, por ejemplo).

Si decides empezar a usar el aceite de CBD para la EII, siempre es mejor empezar con una dosis baja e ir aumentándola progresivamente. Solo después de probar una dosis concreta, si te sientes bien y no notas efectos secundarios, podrás ir aumentando la dosis un 25% semanalmente, o hasta que encuentres tu dosis ideal. 

Vaping o fumar CBD

También puedes vaporizar el CBD, si lo encuentras más efectivo. Al vaporizarlo, su absorción en el cuerpo será más rápida; la mayoría de la gente siente el efecto en un par de minutos. Además, también así evitarás su paso por el sistema digestivo.

Comestibles

Otra opción para tomar aceite de CBD para la EII es en forma de comestibles. Estos comestibles pueden ser desde deliciosos aperitivos preparados en casa hasta gominolas que adquieras en tienda. Lo malo es que si tomas CBD en forma de comestible, este necesitará pasar antes por tu sistema digestivo. Este proceso es lento y los efectos podrían tardar hasta dos horas en aparecer.

Pastillas y cápsulas

Las pastillas y cápsulas son otra opción para tomar aceite de CBD como tratamiento de la EII.  Te permiten obtener tu dosis diaria de cannabinoides sin embrollos. Las dosis son muy específicas y te harán bien. Al igual que con los comestibles, lo malo es que necesitan pasar por el sistema digestivo y su absorción será, por lo tanto, más lenta.

Tipos de CBD para el SII

CBD de espectro completo

El CBD de espectro completo es un aceite de CBD que contiene toda la gama de cannabinoides y terpenos que de forma natural está presente en las plantas de Cannabis. Estos cannabinoides y terpenos incluyen el CBD, el CBG, el CBC, el THCV y el CBN. Todos están siendo investigados y se ha descubierto que tienen propiedades medicinales únicas.

CBD de amplio espectro

Al igual que el aceite de espectro completo, el CBD de amplio espectro contiene la mayoría de los cannabinoides, flavonoides y terpenos presentes en la planta de cannabis de la que se extrajo, con dos importantes excepciones: su contenido en THC y CBN (el cannabinoide en el que se descompone el THC con el tiempo) es casi imperceptible. Si lo que buscas es el efecto envolvente del cannabis, pero tienes sensibilidad al THC (incluso en bajas concentraciones), esta opción te será ideal.

Aislado de CBD 

El aislado de CBD es, como su nombre indica, CBD puro extraído del cáñamo. No contiene otros cannabinoides. Puede tomar forma sólida o en polvo (que puedes usar como suplemento alimenticio o  píldora). S estás interesado en tratarte los síntomas del SII con cannabis pero no quieres ninguno de los efectos asociados con el THC u otros cannabinoides, esta es sin duda tu mejor opción. Además, ¡te será fácil ajustar la dosis y podrás experimentar hasta que encuentres la tuya!

Cannabis medicinal

El cannabis, ya sea medicinal o no, es ilegal en muchos países, y se hay varias referencias escritas sobre los efectos de un uso abusivo crónico; debes saber que algunas pruebas señalan al cannabis como inductor de la psicosis en personas vulnerables.

A pesar de esto, también se ha demostrado que el cannabis con alto contenido de THC es útil para tratar muchos problemas, como el dolor crónico, la epilepsia y la esclerosis múltiple. 

Muchos pacientes de EII afirman que el consumo de cannabis con alto contenido en THC es más eficaz que el CBD, y hay algunas pruebas que lo corroboran, pero la verdad es que no contamos con demasiados datos (dada la complicada situación legal del THC).

Si tienes la suerte de vivir en un lugar donde la marihuana, ya sea medicinal o recreativa, es accesible sin repercusiones legales, acude a cualquier experto de la salud para asesoramiento médico y ¡pregunta!

Efectos secundarios del CBD

A diferencia del THC, el CBD tiene muy pocos efectos secundarios para la mayoría de los adultos. Estos posibles efectos secundarios incluyen:

• fatiga
• irritabilidad
• cambios en el apetito
• náuseas
• cambios de peso

Es preciso que recuerdes que el CBD también podría interactuar con algunos medicamentos con receta, como los de la presión arterial y los que llevan una “advertencia de pomelo”. Por esta razón, consulta siempre con un profesional médico antes de añadir cannabis medicinal o aceite de CBD a tu régimen.  

Falsas creencias sobre el CBD 

Una de las falsas creencias más generalizadas es que el CBD te colocará o te dará sueño o pereza. No olvidemos nunca que el CBD no es psicoactivo y, por lo tanto, no produce ningún tipo de “colocón”.

En cuanto a la sensación de pereza, es verdad que mucha gente usa el CBD para tratar su insomnio, por lo que es puede ser que algunas personas se sientan somnolientas. Para evitarlo, comienza con una dosis bajita, y si te da sueño, ¡redúcela!

La verdad es que el mejor tratamiento para las enfermedades inflamatorias del intestino es, hasta ahora, el uso combinado de medicamentos, cambios en el estilo de vida y dieta. Estos cambios en el estilo de vida incluyen la adquisición de técnicas de gestión del estrés que han demostrado mejorar la salud intestinal en personas que padecen la enfermedad de Crohn o la colitis ulcerosa. 

Efectos adversos en las terapias de la EII

Los episodios adversos son comunes en la terapia de la EII. Por lo general, son transitorios y no requieren la interrupción del fármaco.

En el tratamiento farmacológico de la EII, ten en cuenta que no existe un fármaco o fórmula perfecta para todo el mundo. La respuesta al tratamiento y los acontecimientos adversos dependen de muchos factores, como la gravedad y la duración de la enfermedad del paciente, los antecedentes de tratamiento previo, las comorbilidades (como el síndrome metabólico) y la genética (farmacogenómica). 

Y recuerda: en el tratamiento de la enfermedad inflamatoria intestinal, cada medicamento tiene unos efectos secundarios potenciales asociados. Algunos pueden costarte la vida. Por este motivo, es al

Conclusión

Las enfermedades inflamatorias del intestino son te debilitan. Pueden causarte dolor, desnutrición e incluso la muerte. Pero puede que el alivio no sea tan difícil de conseguir, quizás encuentres el aceite de CBD útil en tu lucha. 

Sí, es cierto, necesitamos más ensayos clínicos, pero estos primeros estudios parecen sugerir que tanto el consumo de CBD como el de cannabis podrían ofrecerte importantes beneficios al reducir síntomas como la inflamación, aliviar la ansiedad y la depresión, controlar la diarrea y las náuseas y mejorar la calidad del sueño. 

¿Y vosotros? ¿Alguien de nuestros lectores ha probado el CBD? ¿Qué tal te ha funcionado? ¡Anímate a compartir tu experiencia!

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